El Barcelona saca adelante el encuentro de Pamplona que se le puso muy cuesta arriba tras el gol de Llorente en la primera parte.
Siete de la tarde, calor abrasador y cara al sol, así es como se encontraron los jugadores del Barça al salir al terreno de juego. El conjunto azulgrana salió al campo descolocado, con posesión pero sin organización, con pocas ocasiones y sin precisión. Problemas tenían Piqué y compañía para divisar el esférico con el sol que les daba de lleno en la cara. Y casi sin darse cuenta, en una jugada del Osasuna, Llorente ponía el 1-0 en el marcador con una bolea que, casi sin angulo, pasa por encima del meta azulgrana,Victor Valdés.
Durante la segunda parte, la prisa aparecía, y las ganas de marcar llevaron a Messi a tener que tirar de un Barça que no tuvo su mejor día. En el primer tanto, con posible fuera de juego de Alexis, fue el argentino el encargado de llevar el balón hasta el área, y esperar para ponerlo en el fondo de la red tras una buena serie de toques entre Pedro y Alexis. En esa misma acción, Puñal fue expulsado con roja directa por Muñiz dejando con 10 al conjunto pamplonés. Y poco más tarde, un gran centro raso de Jordi Alba volvía a caer en pies del astro argentino que con potencia y colocación ponía el 1-2 definitivo que daba los 3 puntos al Barcelona.
Tito Vilanova, por su parte, fue expulsado por estar en contra de una decisión arbitral.
Lo mejor...
El eterno rival, el Real Madrid, volvió a pinchar. Esta vez en el coliseum ante un getafe que supo remontar el gol inicial de Higuain, y dejar en casa los 3 puntos. Los de Mourinho se encuentran a 5 puntos de los azulgranas y siguen sin conocer la victoria en esta Liga.
Lo peor...
Al Barça le costó carburar y propiciar ocasiones de gol, y hoy las cosas han salido bien, pero otro día puede que no de tiempo a remontar el encuentro una vez se haya encajado algún gol. El Barça debe mejorar en este aspecto y concentrarse antes para no sufrir en los comienzos de partido.
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